Después de la limpieza facial, mantener la piel hidratada es uno de los must que debes cumplir si quieres disfrutar de una piel firme y saludable. Para conseguirlo tienes a tu disposición diferentes formas de hidratar tu rostro. Puedes usarlos todos o combinar algunos de ellos:
- Sérum: es un producto con altas concentraciones de ingredientes activo, que se van liberando hacia el interior de la piel. Siempre deben utilizarse en primer lugar en la rutina cosmética, después de la limpieza.
- Crema: es el producto mas utilizado para hidratar nuestra piel, con diferentes tipos de texturas dependiendo de nuestras necesidades. Mantienen la hidratación facial durante todo el día.
- Mascarilla: productos cosmético que se utiliza para complementar el ritual de belleza diario. Contiene una alta concentración de principios activos que actúan de forma instantánea en la piel.
- Nutricosmética: aportamos una hidratación desde el interior, ya sea con omegas, con ácido hialurónico, en forma de cápsulas, polvos en sobres o incluso viales. Así, aseguramos una hidratación completa.
¿Sabías que la piel deshidratada es uno de los motivos principales del envejecimiento prematuro?
Al debilitarse la piel, esta se seca y pierde colágeno, lo que acelera el proceso de envejecimiento. Si no quieres que los primeros signos de la edad aparezcan antes de tiempo, no tengas miedo de usar ya una crema hidratante antiarrugas. Aunque la edad natural de empezar a usarla son los 30, los expertos coinciden al recomendar su uso mucho antes para prevenir en vez de curar.
Así que ya sabes: si todavía no tienes una rutina de hidratación para la piel o si hasta ahora no le has dado la importancia necesaria, es el mejor momento para lanzarte a hacerlo y para empezar a cuidarte.
